Historia del Municipio de
Patzún
Sobre la fecha de
fundación del municipio de Patzún no se tienen documentos que indiquen con
exactitud cuál es; sin embargo se cree que fue en el siglo XII, como parte del
reino Kaqchikel, mucho antes de la conquista de los españoles. Posteriormente,
ya en el período hispánico, se cuenta sobre la fundación del municipio, que San
Bernardino, patrono de este pueblo, tenía atado a su espalda, un pañuelo rojo
en el que supuestamente se encontraban ocultos los documentos que
describían la fundación del pueblo. En la actualidad, se desconoce el
paradero de esos documentos y lo único que se conserva es el pañuelo rojo.
Patzún pertenecía al
reino de Iximche, antigua capital Kaqchiquel. Su nombre proviene de las
palabras Pa = Lugar, y Sum = Girasol, que es el lugar de los girasoles. También
existe otra derivación del nombre; Pa = Lugar, y Tsun = Cuero, que es lugar de
los cueros; ya que se dice que Patzún le vendió una campana a Tecpán a cambio
de unos terrenos que los midieron con la pita (cuerda) que hicieron de los
cueros de una res. Los sacerdotes franciscanos construyeron el templo
colonial y trajeron la imagen del Santo Patrono “San Bernandino de Siena” en el
año 1,540. Se dice que el artesonado de madera y las columnas provienen de
cipreses que cortaron en el mismo lugar. Algunas ramas, provinieron del antiguo
y famoso árbol de Patzún, el “Cipresalón”.
Según el Memorial de
Sololá, versión de Adrian Recinos, Patzún fue destruido en el año 1566, en el
inicio del período hispánico. En el año de 1760, el cabildo o municipalidad fue
destruido por una explosión de pólvora, con un cargamento que venía de México.
Dicha explosión no solamente destruyó el edificio del cabildo sino que también
dañó el tejado de la iglesia, el cual fue reconstruido por el gobernador
indígena Justo Coyote, al poco tiempo después. En el año de 1839, Patzún pasó a
formar parte de los municipios del departamento de Chimaltenango, mismo año en
el que el departamento fue creado.
En el año de 1,976
durante el terremoto del 4 de febrero, el municipio fue parcialmente destruido,
posteriormente fue reconstruido y para lo cual se recibieron la donación de
maquinaria por parte de Holanda.
En las primeras
décadas del siglo XX el pueblo se dividía en varios cantones, pero por orden
del Presidente Jorge Ubico, éstos fueron reducidos a cuatro. A principios del
siglo XX las calles eran de tierra, no había servicios de electricidad, agua ni
electricidad y las viviendas eran construidas de adobe, bajareque y caña.